Hablamos con Natalia Royo, jugadora del Primera Autonómico y entrenadora del Iniciación del Sala Zaragoza
“Tengo más paciencia como entrenadora que como jugadora”
P: Hola Natalia. Has llevado un periodo de altibajos con respecto a tu estado físico, ¿Cómo está yendo la temporada?
En verano me lesioné en un torneo y no lo curé bien. Empecé la pretemporada con dolores y se han ido juntando con otros dolores y cargas, así que esta temporada está yendo bastante mal en ese sentido.
P: ¿Cuándo te lesionaste por última vez?
Hace dos semanas, en el partido contra César Augusta. El sábado pasado no se jugó por el parón de selecciones, así que me vino bien. Ahora ya estoy completando más entrenamientos, porque antes si forzaba también me venían dolores de rodilla, así que no entrenaba o hacía ejercicios específicos y así estaba disponible para jugar partidos.
P: Este finde hay partido contra Sariñena, probablemente sea el más importante en lo que va de temporada. ¿Podrás jugar?
No, no podré, y me da mucha rabia. Es más, si no tuviera mi ficha en Montecanal intentaría jugar, pero no va a ser posible. Es el partido que todo el mundo querría jugar, primero contra segundo, pero es lo que hay.
P: Esta temporada has estado en algún partido con el Plata, ¿Entras dentro de la apuesta de que la última en marcar paga ronda?
No, yo ya no, porque he jugado un par de partidos de pretemporada y un par de liga, entonces en proporción es mucha desventaja.
P: ¿Y esto lo saben las chicas? ¿Estás segura de que no entras?
No, no entro. Bueno, de hecho hablé con Marta porque no podía ser, el resto juegan todos los partidos y tienen muchas más opciones de marcar gol, así que no sería justo.
P: ¿Esperas jugar algún partido más con el Plata antes de que acabe la temporada?
No creo la verdad. No voy a decirte que sí ni que no porque una nunca sabe, pero no creo que juegue más en División de Plata este año.
P: Además de jugar, también eres la entrenadora del equipo de Iniciación de Sala Zaragoza. ¿Qué tal la experiencia?
Pues muy bien. Empecé a llevarlo con Denise, pero cuando vino Rapha tenía que estar más pendiente de ella por el tema del idioma y me quedé sola. Ya había estado antes de entrenadora, pero compitiendo con niños tan pequeños no. Antes había llevado equipos que no competían, y ni los entrenamientos ni los niños son iguales. Por ejemplo, hay algunos que tienen 6 años que son muy diferentes unos de otros físicamente, cambian mucho aunque tengan la misma edad.
P: ¿Esta experiencia te ha servido para entender más a los entrenadores?
Bueno, yo puedo entender que un niño te reaccione de diferente manera a una persona adulta. Luego ya el resto entra dentro de la paciencia del entrenador y el límite que esté dispuesto a aguantar.
P: ¿Y tienes paciencia?
Con los niños sí, con otras cosas no.
P: ¿Contigo misma por ejemplo?
No, muy poca. Tengo más paciencia como entrenadora que como jugadora, porque si fallo cuando juego me salgo un poco del partido, soy bastante negativa en ese sentido.
P: Ya para acabar, dime una porra para el partido del Sariñena.
Va a ser difícil, sobre todo jugando allí. Creo que por el hecho de jugar contra nosotras y que encima es primero contra segundo van a estar extra motivadas, pero voy a decir un 2-4, con 2 goles de Toledo, 1 de Irene y 1 de Rivera.
P: ¿Y si jugaras tú?
Pues no sé, probablemente lo mismo, 2-4 también.