María Moreno deja el Sala Zaragoza buscando nuevos horizontes en los que triunfar en la máxima categoría del fútbol sala nacional. La jugadora zaragozana militará la próxima temporada en Futsi Atlético Navalcarnero, uno de los equipos punteros de la competición que, cada año, lucha por todos los títulos en juego. Un paso adelante y el final de un viaje de la base a la elite para una jugadora que define claramente la filosofía formativa del Sala Zaragoza.
María llegó al club, todavía en edad cadete, proveniente del fútbol 11, donde jugaba en el Zaragoza CFF. Las cualidades innatas de la jugadora y su rápida evolución sobre la pista le llevaron a debutar muy pronto con el primer equipo, alternando sus participaciones con el Sala Zaragoza B, con el que consiguió el histórico ascenso a Segunda división en la temporada 2020-2021 y fue la pieza clave durante toda la temporada en la categoría de plata, con los entrenamientos y algunos partidos en Primera división. Una jugadora total que destaca por su potencia física, unida a una gran calidad técnica, siempre con el gol entre ceja y ceja.
En nuestras retinas se grabó para siempre su gol en la última jornada de la temporada 21-22, que significó el empate ante Penya Esplugues y la consiguiente permanencia, por quinto año consecutivo, del Sala Zaragoza en la élite. Pocas semanas antes, María Moreno había sido una de las protagonistas de la primera clasificación del club para una final a 8 de la Copa de la Reina, disputada en Ourense y en la que el equipo quedó eliminado con honor precisamente ante Futsi, el que será su nuevo equipo a partir de ahora.
Durante su trayectoria en el Sala Zaragoza, María Moreno se ha convertido en un referente del fútbol sala aragonés, siendo convocada de forma continuada por la selección aragonesa sub-19 y, durante esta última temporada, ha sido elegida para representar a España con las selecciones sub-19 y sub-21, si bien una inoportuna lesión le privó de debutar con esta cuando iba a debutar frente a Portugal.
Desde el Sala Zaragoza queremos desear a María la mayor de la suertes en esta nueva etapa, que seguro será tan exitosa como merece y le llevará a lograr los objetivos para los que está plenamente preparada. María: esta es y siempre será tu casa.